Rally fotográfico en Azpeitia, Noviembre.
XXIII Rally fotográfico de Otoño y XVII Rally de Montaña.
Organizados de modo conjunto en una sola actividad por la Sociedad Fotográfica de Azpeitia, la edición de este año, estuvo pasada por agua, pero mereció la pena.
Como siempre, la organización del rally fue merecedora de una buena mención. El recorrido estaba perfectamente indicado, el hamaiketako… buenísimo y los temas sorpresa bien pensados:
- Riachuelo
- Huerta
- Hojarasca (aquí teníamos dudas de valía con una sóla hoja o debían de ser muchas)
- Animal de 4 patas
- Basura... este tema fue un problema pues estaba todo muy limpio, apenas si encontrábamos alguna lata en el lecho del río.
- Cerca (puerta de cercado)... (otro de los puntos dudosos ¿servía la valla sin puerta?)
El recorrido era una delicia visual y cualquier rincón presentaba una buena escena para retratar. Yo fui con algunos compañeros de la Asociación Fotográfica Denbora a la que pertenezco.
La lluvia nos dio una tregua de un par de horas desde la inscripción, para los primeros temas… después, empezó a bañarnos y no paró. Como dice el dicho: "un problema es una oportunidad encubierta"… la lluvia aporta más contraste a los elementos al mojarlos, todo gana en saturación y en detalle, mejorando el impacto visual de la imagen. Eso sí, hay que ir adecuadamente equipado con capa o paraguas que salvaguarden los equipos fotográficos de la humedad.
También es importante llevar trípode para este tipo de situación, con entornos sombríos por la vegetación y cielos cubiertos, se dispone de muy poca luz, se evita así la selección de ISOS altos que repercutan en la calidad de la imagen.
El Rally comenzó junto al precioso santuario de San Ignacio de Loiola, continuando por una carretera que discurría junto a uno de los afluentes del río Urola, llegando a un alto de montaña en el que nos aguardaba el deseado hamaiketako (que hambre a esas horas… jajaja) junto a unos caseríos a cubierto en uno de los establos.. muy propio del entorno con "sabor tradicional" (y olor en este caso… buffsss… jajaja, estuvo muy bien, en serio que me encantó, lástima de la lluvia).
A partir de ahí descender por un sendero de montaña hasta la carretera de inicio. La ruta por esa zona era preciosa con unas vistas dignas de las mejores postales otoñales. Sólo la caminata ya merecía la pena, a pesar de la lluvia.
Llegados al punto de entrega de las fotografías (sólo se podían entregar 36), tomar un buen café y a comer. Un buen día, de esos que se disfrutan.